Un lamentable y escalofriante caso de filicidio conmocionó el barrio Engativá en Bogotá, luego de que Darwin Felipe Beltrán, un hombre de 31 años, presuntamente le quitara la vida a sus dos hijos de 7 y 4 años.
El trágico suceso habría ocurrido tras una discusión con su pareja, madre de los menores, aparentemente motivada por una supuesta infidelidad.
Los hechos se desarrollaron en el interior de una vivienda, donde la Policía Metropolitana debió intervenir rápidamente para contener a una multitud de vecinos consternados y enfurecidos por el crimen, algunos de los cuales lograron agredir al presunto asesino antes de la llegada de las autoridades.
Testigos del barrio declararon que Beltrán presentaba trastornos mentales y, al parecer, no había estado tomando los medicamentos prescritos ni asistiendo a sus citas psiquiátricas. Se conoció, además, que el hombre contaba con antecedentes policiales por hechos violentos, lo cual profundiza la preocupación sobre el acceso y tratamiento de personas con problemas de salud mental en situaciones de alto riesgo.
Lamentablemente, algunos miembros de la comunidad intentaron intervenir al escuchar los gritos de los niños, pero fue demasiado tarde. Este trágico suceso ha generado una ola de indignación en el país, resaltando una vez más la urgente necesidad de fortalecer los sistemas de apoyo y protección para la niñez y las familias en situaciones de vulnerabilidad.
La investigación continúa en manos de las autoridades, mientras el país llora la pérdida de dos inocentes y reflexiona sobre los factores que desencadenaron esta tragedia.